Según la bitácora "Los días de mis noches" dice:
Yo creo en el amor y en la bondad, pero no en la coherencia, a no ser que sea coherencia en el amor y en la bondad. Oigo decir elogios del tipo: "Es un canalla, pero al menos es coherente". Si ya un canalla es espantoso, ¡cómo será un canalla coherente! Un nazi incoherente siempre es preferible a un nazi coherente. El primero no denunciará a las autoridades el paradero de su amigo judío, mientras que al segundo le faltará tiempo para hacerlo.